sábado, 13 de agosto de 2011




A nosotras siempre nos hablan de soltar el pasado, de no vivir en un recuerdo, de dejar avanzar de la memoria y vivir un presente. 

Cinco años.

Y el primer año y Chiquititas, y los abrazamos a escondidas, y los posteos en fotolog's con palabras sinceras, y un que dirán que no importaba, y giras, y teatros, y el primer beso en cámara. 

Y el primero fuera de ella. 

La primera noche en un boliche compartida, el primer baile, la primera mirada de amor, el primer te amo. Porque no, una primera vez. Y todo lo primero, todos los comienzos, las partidas hacía mundos nuevos, todo lo nuevo, lo viejo que volvía, lo que ahora se dividía, lo que se comenzaba a compartir, cómo los vos y yo se transformaban en un nosotros, cómo todo era de a dos. 

Y un segundo año, y la incertidumbre de saber que se va hacer. Y un nuevo programa, un Casi Ángeles y un principio de ciclo que los vió separados. Y las miradas furtivas y a escondidas, los te amo reprimidos, las confusiones, los celos, las idas, las vueltas. Y teatro de nuevo, y la magia, y las cosas compartidas. Y la fama masiva, y los medios encima, y ellos resistiendo. Y el amor que no cesaba, nunca, y exigía salir, volver.

Y el tercer año, y el amor que había logrado volver. Y más miradas, más te amo, más noches compartidas, más risas, más llantos, más celos, pero más juntos que nunca. Y las giras, las noches en los micros compartidas, y las manos que nunca se soltaban, y el amor que flotaba en el aire, que emanaban de los poros. Y los team's delatores y al amor que le importaba un cuerno amar en vista pública. E infama, y más infama, y los programas que exigían un te amo y nunca lo encontraban más que en su miradas. Y un "sólo somos amigos" que marcaba la historia.

Y un cuarto año, y giras internacionales, y el amor que ya se pensaba casado, más unido que nunca. Y México, España... Tantos países siendo testigos del amor. Y los fin de semanas largos en Cariló y la arena sus playas con las huellas de los recuerdos impresas. Y celos, y llantos, y heridas, y errores, y castigos, y separaciones, y, flores, bombones, palabras dulces, perdones, y vueltas. Y risas, siempre risas, y miradas, nunca faltaban las miradas.

Y un quinto año, y yo que tengo la suerte de ver este amor su estado más puro. Y el amor más resistente que nunca,  y las miradas, las voces, los abrazos, las palabras, los te amo, los códigos, todo eso que compartían con el mundo, pero cuándo se trataba de ellos, era especial. Una voz, una mirada, un abrazo, una palabra, un te amo, un código especial entre ellos, para ellos. Y el amor más fuerte que nunca, y más giras, y Barcelona viendo florecer el amor. Y los errores, los derrapes, y una mitad de año avanzada que los encuentra pérdidos, pero el amor sigue luchando. Y un año que termina y los encuentra alejados, pero el amor sigue luchando. 

Y un nuevo año que encuentra un nuevo "amor", pero el amor viejo, el verdadero, que sigue luchando. Y las miradas, los abrazos, las sonrisas, las palabras, todas esas que sólo compartían entre sí, que siguen existiendo. Y el pensamiento lateral, y las confusiones más grandes todavía, y las palabras que se escriben cómo un sí y se pronuncian cómo un no, que quieren decir no, y los enredos, desrendedos, los desamores, los destiempos, los errores, las heridas... 

Y el amor que sigue luchando.

Y el amor que sabe que nadie lo vence, que nadie lo apaga, que sigue resplandeciente en sus ojos.

 Y el amor que se transmite, hace tanto...

Y nosotras, resistiendo. Siempre resistiendo.

Por ese amor que no muere, que existe, que está, que es, que vive, y quiere resurgir, quiere salir, y gritarle al mundo que vive cómo nunca, cómo siempre. 

Y que a todo y todos los puede vencer, y que no le tiene miedo a las confusiones, a los orangutanes, a la lejanía cercana, a los besos ajenos, a los te amo de mentira, a los amores ajenos y pasajeros, porque él es invencible, imborrable, sentido, memorable, eterno.

Único. Y nunca va a morir.

Porque yo seré tonta, estaré un poco loca, pensaré poco y sentiré mucho y tendré la absurda capacidad de leer los ojos de quién casi no conozco, de sentir a distancia lo que "alguien no siente", pero al menos soy feliz. Soy feliz por creer en el amor, en uno de los buenos, en los que terminan con un final feliz.

Esto es lo que siento cómo Laliter. Es esto lo veo veo y siento cómo laliter. Y cómo laliter, no hace falta ya nombrar porque sigo resistiendo. Porque el amor nunca muere, y nunca va a morir. Y yo apuesto la vida por eso.

Julie.- @juulieep

1 comentario:

  1. Un sentimiento tan grande y complejo que llamarlo "un" es poco. Lo que se percibe, se siente y transmite es TAN especial que parece casi tangible!

    Es algo inigualable y como dice Julieep es invencible, imborrable, sentido, memorable, eterno eso que ellos comparten!

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